SS25


Esta temporada llega como un espejismo.
Los bordes se difuminan. El tiempo se pliega. El sol se queda demasiado tiempo.
La SS25 de Defi no es una colección, es una sensación.
Hilos quemados. Sombras cambiantes. Prendas que recuerdan la forma del movimiento.
Los tejidos se desvanecen como la memoria: suaves en algunos lugares, afilados en otros.
Los dobladillos se hunden, las costuras se abren, no por error, sino por diseño.
Cada pieza parece desenterrada de un archivo futuro, tocada por el calor, estirada por la distancia, viva por la intención.
Estas piezas no se llevan puestas. Uno se disuelve en ellas.
Esto es el verano como distorsión, y Defi como la lente a través de la que se envuelve.























